Juanjo López atiende personalmente, prescindiendo de la carta para explicar las opciones del día y sus recomendaciones, dispensando un trato cercano y cortés. La Tasquita de Enfrente se ubica en la calle de la Ballesta, en pleno centro de Madrid, en un local pequeño pero acogedor, con una decena escasa de mesas y una decoración más moderna de lo que podría esperarse desde el exterior: muro de ladrillo visto original del edificio en una de las paredes y pintura a tonos ocre y salmón en las restantes, decoradas con cuadros y fotos dedicadas. Ambiente agradable y discreto, con hombres de negocios y algún que otro político.
Nos obsequiaron con un
pudding de morcilla y calabaza como aperitivo, para después compartir como
entrantes la ensaladilla rusa con erizos y las zamburiñas con salsa de Málaga Virgen, estas últimas especialmente ricas, aunque las raciones un tanto reducidas. Como plato principal continuamos con una de las especialidades de la
casa, la raya con mantequilla negra- exquisita- y las cocochas de merluza -rebozadas,
aunque también las ofrecen al pil pil-; otras opciones del día eran los callos, verduras de la huerta Navarra, becada y presa ibérica. De los postres probamos la falsa torrija, con una terminación muy acertada.
En
general, disfrutamos mucho de la comida, con platos muy apetecibles, servicio
muy atento y ambiente agradable para conversar. No obstante, la zona sigue sin
ser muy atractiva, ni de día, ni menos de noche y el precio nos resultó
excesivamente caro en comparación con propuestas culinarias de similar nivel como La Manduca de Azagra (ver post).
Precio medio:
60€ por persona; bebidas aparte
Nuestra valoración general:
8 sobre 10
GastroTip:
para comidas de negocios y para foodies; mejor
de día, que de noche.
No hay comentarios:
Publicar un comentario