Perrachica.

Se trata de la penúltima apertura del Grupo Larrumba, propietarios de Pipa&Co, Habanera, Marieta (ver post), Juanita Cruz y Frida. Conocemos los dos primeros, que responden al mismo patrón que Perrachica: comida sencilla con una buena relación calidad-precio y ambiente muy animado. Típico ”sitio que-hay-que-visitar”. Aunque somos conscientes del éxito de sus otros locales, especialmente de Marieta, nos sorprendió que el local estuviera lleno una noche entre semana en pleno mes de agosto, con dos turnos y más de cien comensales por turno…

Se encuentra en pleno barrio de Chamberí, cerca de la glorieta de Quevedo, en un local muy amplio ocupado anteriormente por una oficina bancaria. Se entra a través de una especie de “terraza” cubierta, útil para los fumadores, alicatado con formas geométricas llamativas. El interior, que es enorme, se distribuye en diversas zonas intentando crear distintos ambientes: una zona inicial con sofás y mesas, bonita aunque puede ser un tanto incómoda para cenar; otra zona de mesas situadas en un nivel elevado a media altura; además, dos barras, una a la entrada y con mesas altas en uno de sus lados y otra casi al fondo del restaurante, donde a su vez hay varios espacios con numerosas mesas. El conjunto resulta bonito, con una estética de corte industrial con conducciones de aire a la vista, pero también mezclada con elementos modernos como una gran estantería con marcos sin lienzo unos y otros con lienzo apoyados en los estantes, columnas formadas por antiguas cajas de seguridad, enormes puertas macizas de acero procedentes de la oficina bancaria que ocupaba el local y que dan acceso a los cuartos de baño. En definitiva, una decoración muy interesante y atractiva. Merece la pena dar una vuelta por el local. 

Evidentemente, tal volumen de mesas da lugar a que el local resulte ruidoso y poco propicio para una velada tranquila, pero sí para un almuerzo o cena con amig@s.

Como es habitual en este tipo de restaurantes, la carta es un tanto generalista, sin grandes pretensiones gastronómicas, aunque eso no obvia para que la comida esté razonablemente buena. En los entrantes encontramos muchos apetecibles: anchoas de Santoña sobre pan  de cristal; tiradito de viera y lubina; berenjenas con miel de caña y hummus –bien, aunque el hummus mejorable-; zamburiñas gratinadas; croquetas -de rabo de toro o de chipirones con ali oli, muy ricas estas últimas-, así como algunas propuestas a base de huevos, como el poché con parmentier de patata y aceite de trufa y “los huevos del chef” con huevo poché, salsa de boletus y trufa rallada. Los platos principales van desde hamburguesas, pastas y pizzas, hasta pescados y carnes. De las primeras, destacaríamos la hamburguesa “Perragrande” – con solomillo picado a cuchillo, bacon troceado y queso edam, (bien, sin mayores pretensiones); el risotto de arroz negro y tiras de calamar y la pizza de mortadela trufada y boletus confitado. De las carnes, señalar el kebab de jarrete marinado en hierbas, con salsa de yogur y toque de menta, el steak tartar cortado a cuchillo y los tacos de entrecot, pico de gallo y aguacate, que están un poco picantes pero recomendable. De los pescados: la lubina al pibil con cebolla encurtida y chile habanero; el tartar de salmón, algas wakame y mayonesa ligeramente picante; la pata de pulpo cocinada en brasas con parmentier de patata y el tartar de atún rojo y huevo frito de codorniz.

Cuenta con brunch los fines de semana, a base de los clásicos huevos benedictine -incorporando como alternativa una “versión latina”, con base de arepa y aguacate-; crepes de jamón dulce y queso gruyere; mollete de Antequera con jamón ibérico y aceite de oliva y quesadillas de jamón ibérico y queso filadelfia, entre otros.

En general, Perrachica ha respondido a nuestras expectativas y teniendo claro que no es un sitio al que se va a “una comilona” y que el ambiente es muy bullicioso, merece la pena conocerlo y disfrutar del local, de la comida y del conjunto en general. Sin duda, uno de los locales de moda del momento.

Nuestra valoración general: 7,5 / 10

Precio medio: 30 euros por persona, bebidas aparte

GastroTip: para comer o cenar, con grupos de amig@s, aunque también es una buena opción para ir en pareja; recomendable el brunch si se va con niños.