Bacira. Grandes promesas

Aunque acabamos de conocerlo, Bacira comenzó su andadura hace poco más de un año y apunta grandes maneras. En cierto modo nos recuerda a Lakasa como una de esas aventuras gastronómicas que emprenden cocineros, ya de cierta experiencia, que desarrollan su sueño en locales en barrios castizos de Madrid (Cuatro Caminos, Chamberí...) con propuestas diferentes y deliciosas. 

El local cuenta con una sala cuadrada con paredes blancas y zócalo de baldosa con cuadros y rombos, columnas en verde, originales lámparas con bombillas incandescentes vintage y conducciones de aire a la vista que recrean un conjunto moderno y a la vez fresco. 

La carta se basa principalmente en la cocina mediterránea con ciertos guiños asiáticos y peruanos consecuentes con los antecedentes de los creadores de Bacira. Muchos de los platos pueden ser pedidos en media ración; de hecho, recomendamos optar por varios de ellos para compartir y así probar más opciones de la carta. Dispone de un menú del día (unos 14€) y un menú degustación (40€). Entre los platos principales destacaremos el tataki de atún con cous cous; las cocochas de bacalao con curry thai; las zamburiñas con holandesa de yuzu y las albóndigas de rabo de toro sobre puré de patata, ricas aunque esperábamos algo más...Terminamos con una versión del carrot cake razonablemente buena y para una próxima visita nos apuntamos la deconstrucción del polo Drácula...

El servicio muy atento. En conjunto nos ha gustado mucho Bacira, con unos platos bien presentados y ricos y sobre todo diferentes y unos precios muy razonables. 

Nuestra valoración general: 8 / 10

Precio medio: 25€ por persona, bebidas aparte.

GastroTip: Para comer o cenar, en pareja o con amigos; ambiente informal.